Con la participación de más de 30 delegados de todo el país de manera telemática, bajo el lema “Por una nueva constitución y la democratización de la institucionalidad cultural” se llevó a cabo la primera Convención Nacional de ANFUCULTURA, los días 10 y 11 de marzo. El objeto, cumplido con creces a juicio de las y los delegados, fue definir colectivamente una estrategia sindical respecto del rol de los y las trabajadores/ de la Cultura en el momento histórico que vive el país tras la revuelta social y el impacto de la Pandemia.
De esta manera las y los delegados dieron cuenta de un diagnóstico colectivo del escenario actual de la organización, tanto a nivel interno, como externo. En este diagnóstico, los principales nudos detectados y que tienen un impacto, dicen relación con la contribución de las políticas culturales a la desigualdad social del país. Esta problemática se profundiza, dado el problema estructural de dotación efectiva que hace imposible tanto la ejecución interna como el apoyo necesario a áreas de impacto en la población, atentando contra la calidad y cantidad de atenciones en proyectos clave para los territorios, así como la orientación y supervisión a los fondos.
Respecto de estos últimos, se hace necesario recalcar que la concursabilidad está en crisis y que se hace más que urgente una reforma de los Fondos de Cultura, antecedida de un proceso serio de análisis que establezca cómo se están focalizando y cómo llegan esos presupuestos a los territorios de manera equitativa y eficaz. En este sentido, se propone diversificar las alternativas de financiamiento y superar la concursabilidad como principal instrumento, ya que de lo que se trata es, más bien, de cómo la ciudadanía se involucra en los procesos de participación cultural. Lo que hemos tenido, es un aumento sostenido de los presupuestos para fondos concursables, sin incremento correlativo de la dotación.
Por último, y entre otros elementos de diagnóstico que serán entregados en el documento final, es fundamental establecer un cruce efectivo de las herramientas de planificación regional, sectorial y local ante la actual disociación de los instrumentos de planificación (ERD, Política cultural, PLADECOS, etc).
En segundo lugar, la convención continuó la discusión enfocándose en el rol de ANFUCULTURA en el Proceso Constituyente, ejercicio que resultó esclarecedor para considerar en nuestra hoja de ruta durante el proceso constituyente.
En relación a este tema, uno de los consensos es que el MINCAP necesita un cambio estructural, saliendo del “sector cultura” y construir desde la transversalidad un vínculo con los territorios y sus organizaciones. En esta perspectiva, el rol de los/as trabajadores debe ser desde el vínculo y puente con la ciudadanía en esos territorios. Dado lo anterior, el fin del estado subsidiario en reemplazo de un estado garante de derechos es indispensable para garantiza el “derecho a la cultura”
Ahora bien, en el contexto del debate constitucional, hay claridad de que ANFUCULTURA debe mantener la organización y movilización, planteando la unidad en la acción con todas las organizaciones del MINCAP y de la sociedad civil. En este mismo escenario, se acuerda apoyar a los candidatos de las fuerzas transformadoras y entregar a les constituyentes electos, las propuestas de ANFUCULTURA.
La convención también tuvo espacio para el trabajo conjunto con nuestra confederación madre, ANEF, quien con la presencia de su presidente José Pérez Debelli y la Secretaria Técnica de Cultura, Victoria Escalante, compartieron el análisis sobre el rechazo al proyecto de nuevo empleo público del gobierno. En complemento con lo anterior, se contó con la presencia de los Abogados de la Defensoría Popular de las y los trabajadores, José Portiño y Naiara Susaeta, quienes se refirieron a las instrucciones para el sector público con motivo de las elecciones 11 de abril, resolviendo todas las dudas de los asistentes.
Para finalizar el primer día de convención, se implementó la Cuenta Sindical Nacional y el Balance Financiero del 2020 en donde se volvieron a compartir aspectos clave sobre la implementación del ministerio, la gestión de las metas institucionales y los incentivos para las y los trabajadores, la salud psicosocial y la seguridad laboral, la formación y capacitación laboral y sindical, nuestra orgánica, la administración, las finanzas, los convenios sindicales y la política de alianzas.
El segundo día, de convención, estuvo enfocado en el trabajo de planificación grupal para proyectar los objetivos de la Gestión Sindical 2021, en base a la cuenta sindical nacional y sus elementos de diagnóstico. Destacaron como objetivos a alcanzar este 2021 finalizar el proceso la postulación, selección y toma de razón del hito III este año; impulsar una propuesta presupuestaria para el proyecto de presupuesto 2022, partida 29, que asegure la continuidad del proceso de encasillamiento, condiciones laborales dignas y la correcta ejecución de planes y programas en el escenario de pandemia; impugnar ante Contraloría General de la República la legalidad de la orgánica presentada por el Gobierno; reponer el proceso de nivelación de salarios en conjunto con DIPRES y la SSCA, con prioridad en los salarios más bajos; influir en la discusión sobre políticas públicas mediante la edición, publicación y difusión académica (seminarios) de los insumos sobre política pública que se generen desde la organización; fiscalizar y denunciar ante los organismos competentes, los incumplimientos en materia de salud psicosocial y prevención del Covid 19; fortalecer nuestro vínculo con ANEF, CUT y ratificar nuestra alianza con la Coordinadora Intersectorial Cultura en Emergencia (CICE).
Finalmente, la convención proyectó, también de manera participativa, la carta Gantt de trabajo de nuestra organización para el 2021, integrando a la línea de tiempo las acciones y actividades para el logro de objetivos. El lunes 22 de marzo se entregarán a las bases todos los documentos y resultados de la convención, donde destaca una nuestra nueva estrategia sindical para este año.
