El Directorio Nacional de ANFUCULTURA expresa su total solidaridad con la movilización que están llevando a cabo los Sindicatos de Trabajadores/as a Honorarios (SITTHOVAL) y de Trabajadores Invisibles de la Municipalidad de Valparaíso (SITTIMUVAL) ante la oleada de despidos que está llevando a cabo el alcalde Jorge Sharp, afectando a 44 funcionarias y funcionarios con 10 y hasta 15 años de servicio trabajando en esta condición, dentro de los cuales hay 5 dirigentes/as sindicales.
Al mismo tiempo, condenamos el menosprecio expresado por el edil ante las organizaciones sindicales que lo interpelan de frente y en los parámetros “ciudadanos” que al parecer la autoridad ocupó solo como un slogan para hacer buenas campañas. Hoy en pleno siglo XXI y en el proceso de transformación social que el país vive desde la base, resulta completamente impresentable que un alcalde resuelva eliminar voces disidentes como patrón de fundo, o tape hoyos financieros por mala gestión a costa de cesantía, como gerente de retail.
Una alcaldía ciudadana de verdad evalúa el impacto en su propia ciudad de 44 familias que quedarán su principal ingreso antes de tomar cualquier decisión y en caso de tener que privar a alguien de su trabajo, le expresa claramente y respetando su dignidad los motivos, no con correos masivos. Una alcaldía ciudadana de verdad jamás desconocería y ningunearía a las organizaciones de base que se desarrollan en su seno para intentar zafar un conflicto. Una alcaldía ciudadana de verdad dialoga, escucha y toma decisiones colectivas, no ejecuta verticalmente las instrucciones del jefe sin cuestionar, ni discutir. Una alcaldía ciudadana de verdad no hace “razzias”, ni atemoriza a sus funcionarios, mucho menos falta a la verdad.
Por estas razones, nos declaramos en alerta y a disposición de lo que las y los compañerxs de afectados por las decisiones del alcalde necesiten para recuperar sus fuente de trabajo con justicia y dignidad.
